En este artículo se examina el impacto de la reelección del procurador sobre el sistema político en Colombia, en el equilibrio de poderes y en la lucha contra la corrupción. Contrario a lo que sostienen sus defensores, tal como se ha adelantado el proceso ante el Senado de la República, la permanencia de Ordoñez en el cargo representaría una involución en los avances democráticos consagrados en la carta del 91, pues se han desconocido aspectos vertebrales como la separación de las ramas del poder, la transparencia y el carácter no partidista de los órganos de control.
Por: Armando Novoa García
Director Centro Estudios Constitucionales-Plural
Publicado en Razón Publica