Erythroxylum LA HOJA CONDENADA

Por Indepaz

Una tras otra, las hojas entran en la boca como hostias quebrándose entre mordiscos y saliva. Se acomodan dentro de la mejilla y ahí se ablandan, se calientan, se disponen a entregar su apacible compañía ofrecida en saliva verdosa y amarga. Es buena. Sus nervaduras tienen la virtud de transportar millones de años de evolución natural y un sin fin de intrigas por sus bondadosas propiedades químicas. Es buena sin duda. Es resistente como una mamita boliviana; es una mamita que sustenta culturas.